• El Gobierno y el FMI llegaron a un entendimiento general que evitaría el default con el organismo internacional.
  • Bonos en dólares recuperan hasta 10% al conocerse la noticia. De alcanzarse (y cumplirse) un acuerdo con el fondo habría mayor recorrido para estos títulos.
  • El pago en marzo con el FMI es una fecha límite para formalizar el acuerdo: ese mes vencen USD 2.800 millones y Argentina no tiene reservas netas para afrontarlo.

El último viernes, Argentina logró un principio de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, evento que despejó en el corto plazo la posibilidad de un default con el organismo y disparó una recuperación marginal en mercados de bonos y acciones.

El Gobierno argentino informó que se sentaron las bases generales para un programa de Servicio Ampliado del FMI que tendría una duración de 2,5 años y un cronograma de repagos a partir de 2026. El mismo, en principio, permitiría al país refinanciar los vencimientos del acuerdo original y aplazar de este modo importantes compromisos de capital programados para este año y el próximo.

Gobierno y FMI acordaron los trazos generales para un acuerdo, que todavía debe rubricarse con el trabajo conjunto del equipo técnico argentino y del organismo, previo a una aprobación por el comité ejecutivo del FMI. El mismo contemplaría, según consignó el ministro económico argentino, una serie de revisiones trimestrales como requisito para liberar las facilidades de pago. El programa también debería ser aprobado en el Congreso Nacional.

Cómo señalamos en el último envío, la perspectiva de un estado de cesación de pagos con nuestro principal acreedor internacional hubiera redundado en un deterioro de las variables macro y financieras, algo que los inversores habían empezado a incorporar en el precio de los activos.

Sin embargo, las novedades respecto a un acercamiento de posiciones produjeron un efecto inverso en activos, con recuperaciones superiores a los 150 puntos básicos de reducción de rendimientos (subas de precios de hasta 10%) en algunos tramos de la curva soberana en dólares bajo ley Nueva York.

Bonos en dólares muestran una recuperación al conocerse la noticia de preacuerdo

Tasa nominal anual para bonos soberanos en dólares, ley Nueva York, actual y hace 5 días

Fuente: Criteria

La corrección moderada de ciertos desequilibrios en la economía, así como la garantía de una política económica co-guiada por el FMI hacia un sendero de equilibrio fiscal, podrían generar un movimiento de upside en la deuda argentina desde niveles deprimidos. Esto lo venimos señalando desde hace varios informes respecto al potencial de ganancia de capital en papeles argentinos ante un escenario de acuerdo. Sin embargo, cabe destacar que el escenario descontado por los precios de los bonos es aún uno de notable complejidad y alta probabilidad de una nueva restructuración.

La fecha límite para sellar un acuerdo formal sería la tercera semana de marzo, cuando Argentina debería abonar una cuenta de USD 2.800 millones con el organismo. Dado el nivel actual de reservas netas, inferior a ese monto, el país no estaría en condiciones de afrontar el repago y debería buscar la refinanciación, o fuentes alternativas de fondeo.

En el preacuerdo, Gobierno y FMI sentaron las bases en cuánto a algunos temas relevantes, como el sendero fiscal. Argentina se comprometería a una reducción gradual de su déficit desde 3,0% de PIB en 2021 a 2,5% de PIB este 2022, 1,9% del PIB en 2023, 0,9% en 2024 y 0% en 2025. Si bien no queda claro de momento la calidad de ese ajuste, lo cierto es que el organismo hizo hincapié en una recomposición progresiva del gasto en subsidios energéticos (suba de tarifas).

A su vez, el entendimiento implicaría una reducción en el financiamiento monetario al Tesoro con el objeto de reducir la inflación en el mediano plazo. El BCRA financiaría sólo 1,0% del PIB este año (luego 0,6% en 2023 y 0% en 2024), por lo que el Gobierno debería recurrir a fondos de socios internacionales y mercado interno para solventar el déficit.

Aparentemente, el FMI no está exigiendo reformas estructurales para alcanzar tales fines, ni una devaluación discreta en el tipo de cambio oficial. Para apuntalar el fondeo interno, el preacuerdo incluiría un programa de tasas de interés reales positivas.

Como señalamos anteriormente, hoy en día Argentina representa el 33% de stock de créditos en cartera del FMI, seguido por Egipto, con 16%. Hasta aquí, nunca un país con un PBI de nuestra dimensión entró en cesación de pagos con el organismo.

Recomendaciones de inversión

Si bien hemos insistido en envíos anteriores acerca de la conveniencia de un portafolio diversificado global, la intención del informe es asistir a aquel inversor que busca asumir riesgo local en su cartera.

En informes anteriores, señalamos que a precios vigentes la deuda argentina en dólares tenía un potencial de upside si se llegase a materializar una reorganización de las variables macroeconómicas y, fundamentalmente, progreso concreto en las negociaciones con el FMI. Sostenemos que, de lograrse efectivamente un acuerdo beneficioso, podría haber atractivo en el margen para bonos soberanos.

Si bien los bonos soberanos en dólares son una oportunidad atractiva para multiplicar capital, esta opción debería quedar limitada a aquellos inversores con alta tolerancia al riesgo. Esto por la naturaleza volátil del activo, y la alta incertidumbre respecto a los escenarios futuros.

Consulte a su asesor para determinar la configuración de su portafolio de acuerdo a su perfil de riesgo.