Finalmente se confirmó el programa de canje de bonos en dólares del sector público. El mismo contienen dos medidas puntuales:
- Canjear la tenencia de Bonos legislación extranjera “Globales”, en manos del sector público que asciende aproximadamente a los USD 4.000 millones VN, por un nuevo título Dual en pesos con vencimiento en 2036.
- Venta a través de subastas de los Bonos legislación local “Bonares”, que suman USD 13.000 millones VN. El 70% de los pesos resultantes deberán suscribirse en el bono dual 2036, mientras que el 30% restante podrá disponerse libremente por parte de los organismos.
De manera adicional, esta disposición resulta en un mecanismo de financiamiento para el gobierno. Da la posibilidad de aumentar su endeudamiento en pesos por un monto equivalente al 70% de lo producido por la venta de “Bonares”, que equivale aproximadamente al 0,8% del PBI.
Además de afectar las paridades de los bonos, de completarse las operaciones, aumentará la tenencia de deuda en dólares en manos privadas pero la foto no cambia de manera significativa:
- Bajo el supuesto de que se completen todas las operaciones del programa, la deuda en manos de tenedores privados aumentaría del 35,5% al 38,9%, mientras que la deuda en manos del sector público disminuiría del 45,9% al 42,5%, y se mantendría en un 18,6% la deuda contraída con instituciones financieras internacionales (IFI).
- Bajo la misma suposición, la deuda en moneda extranjera disminuiría ligeramente del 66,6% al 65,57% sobre el total de deuda. El total de la deuda representa el 79,8% del PBI.
- En los últimos años, como se puede observar en el gráfico, el sector público ha incrementado su endeudamiento en moneda local en relación con el endeudamiento en moneda extranjera, después de que Argentina pierda acceso a los mercados internacionales de deuda a partir de mediados de 2018.
- A pesar de que la relación entre la deuda en manos del sector público y la de tenedores privados ha mantenido cierta estabilidad a lo largo del tiempo, en los últimos años se incrementó la tenencia de la deuda por parte de organismos públicos. Al perder acceso al mercado internacional de deuda, el gobierno tuvo que recurrir al financiamiento de organismos públicos en el mercado local, principalmente mediante el FGS y el BCRA. Esta situación ha llevado a un incremento en la dependencia del país de fuentes de financiamiento internas, representando un desafío para la gestión de la deuda.